Medellín suena diferente

J. Caro

Mira, mi hermano,
para empezar te voy a explicar,
yo sé que en lo que piensas
es primero en Escobar.

​

Una historia que nos marca,
muy difícil de cambiar,
pero déjame te cuento,
eso ya se quedó atrás.

​

En el pasado,
donde vivir era complicado,
estando con el miedo
de sufrir un atentado.

​

Una madre llorando,
niños, sangre derramando,
pero hoy es diferente,
ya las cosas han cambiado.

​

Entiende:

​

La alegría acá se siente,
Medallo se destaca
por su ambiente y la gente,

​

alegres, amables y muy trabajadores.

​

No somos delincuentes,
somos gente con valores,

​

que ayudan al de menos
y ayudan al de más.
La verdad no nos importa,
lo importante es ayudar.

​

Y que a ti te quede claro,
y no te parezca raro,
ver un joven en la calle
con micrófono en la mano.

​

(Pero también están las fiestas y las drogas.)

Ey, espera,
en este mundo es que te ahogas,
ya no se piensa en eso,
se piensa en el futuro.

​

Ya son profesionales,
eso a ti te lo aseguro.

​

Y sí, lo sé,
nos gusta la parranda,
pero no es necesario
drogarse pa’ disfrutarla.

​

La hacemos en familia,
se bebe es aguardiente
o unos roncitos suaves,
y se siente buen ambiente.

​

O no, están los que nunca beben,
pero de igual disfrutan ellos
sin dañar su mente.

​

Van es por el sancocho
o por la frijolada,
y a tomarse un tintico
con una buñuelada.

​

Y no,
nadie a ti te va a drogar,
tampoco se te obliga,
a ti no te van a matar.

​

Ya la gente no le teme,
ya la gente no se esconde,
ya la gente trabaja
y los niños no son ladrones.

​

Y quiero,
mi hermano, que entiendas muy bien
lo que te estoy diciendo:

​

que la música, el arte y estudio
ya son lo primero.
(Acá hay cultura, gente buena, jóvenes con futuro.)

​

Y quiero,
mi hermano, que entiendas muy bien
lo que te estoy diciendo:

​

que la música, el arte y estudio
ya son lo primero.
(Gente trabajadora, que sale adelante.)

​

(¿O dígame, qué no le ha quedado claro?)

​

(¿Y entonces las prostitutas?)

​

Recuerda
que tienes una madre.

Acá ya las mujeres
pueden salir adelante:

​

abogadas, contadoras,
también hay vendedoras,

que luchan día a día
y trabajan por más horas.

​

¿Pa’ qué?

Por un plato de comida,
para que ya sus hijos
tengan una buena vida,

​

tengan un estudio
o tengan un trabajo,
salgan adelante
y no se queden en lo malo.

​

Ellas
son la cabeza de hogar,
y son lo más hermoso
que Dios nos pudo dar.

​

Gracias a que están ellas,
la vida es más bella,
y son nuestro camino
iluminado por estrellas.

​

Mujeres bien berracas,
acá eso es lo que sobra.

​

Mujeres bien hermosas,
que son como una obra.

​

Medallo es cultura,
cultura que enamora,

​

igual que esta historia
de cultura que transforma.